Criterios para determinar una pensión compensatoria

¿Sabes qué criterios son necesarios para determinar una pensión compensatoria? Cuando se da o se produce una situación de divorcio, esta puede provocar un desequilibrio económico para uno de los cónyuges, en cuyo caso, tendría derecho a una pensión compensatoria. La pensión compensatoria se concede cuando el desequilibrio se produce como causa de la pérdida de derechos económicos o legítimas expectativas por parte del cónyuge más desfavorecido por la ruptura, a consecuencia de su mayor dedicación al cuidado de la familia u otros asuntos, por ello se le da una compensación en forma económica.

La pensión compensatoria suele darse en los casos en los que uno de los cónyuges ha dedicado su tiempo al cuidado de los hijos y hogar familiar, perdiendo todas las expectativas laborales que tenía, mientras que el otro ha continuado con su vida laboral. La finalidad de la misma pretende evitar que el perjuicio que puede producir la ruptura de la convivencia recaiga exclusivamente sobre uno de los cónyuges y para ello habrá de tenerse en consideración ciertas premisas.

Premisas que hay que tener en cuenta para conceder una pensión compensatoria

  • Lo que ha ocurrido durante la vida matrimonial y por supuesto, la dedicación a la familia y la colaboración con las actividades del otro cónyuge.
  • El régimen de bienes a que han estado sujetos los cónyuges en tanto que va a compensar determinados desequilibrios.
  • Su situación anterior al matrimonio para poder determinar si éste ha producido un desequilibrio que genere posibilidades de compensación.

La pensión compensatoria, como tal, nace después de que se haya roto el vínculo matrimonial. Así, la primera condición es que debe haber existido matrimonio para solicitar dicha pensión, ya que en el caso de las parejas de hecho no pueden reclamarla dentro del proceso de reclamación, sino que deberán acudir a juicio.

Asimismo, cabe recordar que la pensión compensatoria se debe reclamar en el mismo momento en que se produce la ruptura. En caso contrario, se corre el riesgo de perder la posibilidad de solicitarla y obtenerla porque se puede entender que tenemos medios suficientes para subsistir sin la misma. Para solicitar la pensión compensatoria se deben cumplir una serie de requisitos a los que nos tenemos que sujetar.

Requisitos para solicitar la pensión compensatoria

Que haya existido un vínculo matrimonial: Para cumplir con este requisito tiene que haber un matrimonio, ya sea en régimen de gananciales o de separación de bienes, pero nunca en parejas de hecho. En este último caso, si se produce algún daño como consecuencia de la ruptura, la persona más perjudicada recibirá una compensación similar a la pensión compensatoria llamada indemnización. Para reclamar esta pensión es necesario solicitarla en la demanda de divorcio o separación, de lo contrario sería imposible obtenerla. Es decir, si nos separamos físicamente y no la solicitamos, se da por entendido que somos independientes a los ingresos del otro cónyuge y se nos denegará la misma.

Que exista un desequilibrio económico como consecuencia de la ruptura: Para que se dé una pensión compensatoria, el divorcio o separación debe producir, en uno de los cónyuges, una situación de empeoramiento o desequilibrio económico respecto al otro. Esto obliga a analizar cuál era la situación económica del matrimonio, en qué situación económica quedan los cónyuges tras la separación o divorcio y, por lo tanto, si existe ese empeoramiento económico o pérdida de oportunidades laborales. Para valorar si hay o no un desequilibro económico tenemos que tener en cuenta los siguientes factores:

  • Ingresos propios de ambos cónyuges.
  • Descenso del nivel de vida.
  • Duración del matrimonio.
  • Edad y formación laboral.
  • Dedicación pasada y futura a la familia.
  • Estado de salud de los cónyuges.

¿Cómo se calcula el importe de la pensión compensatoria?

Para saber cuál es el importe de la pensión compensatoria que recibirá él/la cónyuge, es necesario calcularlo en base a los ingresos netos del cónyuge obligado a dar la pensión, la edad y preparación profesional del otro, y la posibilidad de generación de ingresos de este.

Son frecuentes las resoluciones que suelen fijar entre un 20-30% de los ingresos netos del obligado al pago como límite máximo. Una vez fijada la pensión compensatoria, esta debe ser actualizada conforme al IPC, a fin de que no se pierda poder adquisitivo. Esta obligación de actualizar la pensión, una vez establecido el método en sentencia judicial, es automática, es decir, el obligado al pago no debe esperar a ser requerido por la otra parte para la actualización, sino que la tiene que aplicar automáticamente.

Conclusiones

Para establecer una pensión compensatoria es necesario realizar un acuerdo mutuo de divorcio entre ambos cónyuges y cumplir una serie de requisitos para recibirla. Una vez otorgada, se tendrá que calcular el importe de la misma e irla actualizando conforme a lo que diga la sentencia judicial, generalmente respecto al IPC. Las pensiones pueden ser vitalicias o temporales.